El doctor en Antropología Raúl Reloba propone en una tesis acometer la carretera León-Braganza, un Gobierno comarcal frente al individualismo municipal y el asociacionismo como claves de futuro
27.02.2015 | 10:23
Un grupo de turistas durante una visita al Lago de Sanabria.
Foto L. O. Z.
ARACELI SAAVEDRA Las políticas de desarrollo dirigidas a la comarca de Sanabria-Carballeda desde los centros de poder no han beneficiado a su desarrollo. En unos casos por el uso equivocado de los fondos europeos y en otros por incidir en el recorte de gastos y servicios, que empeora cualquier posibilidad de desarrollo. Este es el punto de partida del zamorano y doctor en Antropología por la Universidad de Salamanca, Raúl Reloba Ferrero, y que ha reflejado en su tesis "Etnografía de la comarca de Sanabria-Carballeda: economía, cambio social y Desarrollo", Ediciones Universidad de Salamanca, que aborda desde la Antropología Aplicada.
El proceso histórico vinculado al aislamiento, la realidad actual y las posibles soluciones se plantean en el trabajo de su tesis. Para el investigador, las soluciones "no deben venir diseñadas tanto desde las altas esferas, aunque sí se debe contar con el dinero de éstas, sino desde la población afectada, que a menudo conocen mejor su entorno que los políticos que están lejos".
La situación de la comarca no es todo lo favorable que se podría esperar. Reloba subraya que está marcada ancestralmente por el aislamiento geográfico y su situación periférica y fronteriza; a ello se une a la falta de iniciativa empresarial, el escaso peso político, la despoblación y la ausencia de industrialización. Este aislamiento es una constante en este territorio hasta mediados del siglo XX.
El estudio profundiza en una batería de propuestas para promover una economía sostenible y de desarrollo, entre ellas el aprovechar las características y diversidad del entorno natural, una vez franqueado el aislamiento geográfico en el sentido de accesibilidad. Entorno natural e industria "pueden ir de la mano sin dañarse mutuamente" evalúa Reloba.
El entorno natural ha pasado a ser una ventaja por las características idóneas para la producción de energía renovable, el atractivo para el turismo y la protección de la biodiversidad. Aunque la legislación sobre espacios naturales protegidos pueda parecer que limita a la población por el entorno natural, "la realidad es que puede desarrollarse una industria sostenible en torno a esos espacios".
Propone "educar para emprender" y anular el poso de pesimismo y la imagen negativa del futuro económico de Sanabria-Carballeda, un pesimismo englobado en una supuesta mentalidad de falta de iniciativa empresarial en la zona. "Muy pocos aconsejan invertir y los que tienen una empresa lo ven mal" un lastre a combatir seriamente y desde las instituciones, como ya están haciendo a iniciativa de la Unión Europea, para impulsar un espíritu empresarial en los habitantes de la comarca, en los más jóvenes. La propuesta pasa por desarrollar cursos de emprendimiento y capacitación, acompañados de ayudas y subvenciones para empezar a desarrollar las ideas que en adelante le surgieran a cada uno, para poner en funcionamiento una red empresarial respetuosa con el entorno y preparada para saber desenvolverse en el sistema global actual. Se debería organizar, al mismo tiempo, una plataforma que trabajara para alcanzar una Denominación de Origen propia que sirviera como lanzadera de productos de calidad los cuales tienen un mercado reducido pero seguro a nivel nacional e internacional.
Apoyar y promover iniciativas de repoblación es otra de las medidas a incentivar para el desarrollo. La despoblación es tan grave que se debe aunar las iniciativas oficiales y particulares en este sentido. Hay que mostrar a los futuros pobladores cuál es la realidad a la que se tienen que enfrentar viviendo en un área rural.
Es necesario lograr la inversión de empresas que produzcan puestos de trabajo y facilitar la apertura de negocios a los emprendedores, con ventajas fiscales y, si es necesario, no cobrando impuestos inicialmente. "Sin empleo es prácticamente imposible lograr el desarrollo, y no se puede pensar en subvenciones y ayudas eternas" subraya el autor.
Para el estudioso Sanabria y Carballeda tiene que impulsar la internacionalización de la comarca para conseguir así un turismo de calidad, y también inversión. Los municipios deben acceder a espacios internacionales donde sus cualidades sean reconocidas y vendibles. Pero a la vez "debe proteger esas cualidades que la hacen distinguible".
Conseguir un mayor peso político pasa por cuatro propuestas que son competencia de los políticos. La primera medida es lograr el eje León-Bragança para revalorizar la zona y dar fuerza al desarrollo de la economía de la comarca. Es una manera de contrarrestar, mínimamente, el efecto centrípeto que tienen los grandes ejes del centro de Europa a la hora de atraer a las empresas y la inversión hacia ellos. Sanabria-Carballeda tiene más fácil salir del aislamiento económico si se concibe como parte de una región más amplia.
La segunda medida es conseguir un gobierno comarcal, que actúe como un único organismo político que defienda los intereses, frente a la actuación individual de los diversos municipios mirando cada uno por sus propios intereses, que se unen algunos de ellos para fines puntuales. La comarca, expone, está desmembrada entre diferentes mapas de actuación que se superponen y se la reparten: la estructura educativa tiene sus propias secciones, la médica las suyas, etc. Solo la Administración de Justicia, a través del Partido Judicial, mantiene una unidad comarcal, amenazada por el intento del gobierno del país de centralización absoluta en las capitales de provincia.
El asociacionismo es la tercera medida propuesta por el autor, para mantener vivos los municipios y la comarca. Las distintas asociaciones deberían llevar a cabo acciones conjuntas para aunar fuerzas. Actuar a través de una asociación local permite tanto a residentes como descendientes que residen fuera intervenir en el futuro de Sanabria- Carballeda, y de sus municipios, aun sin vivir o estar empadronado allí.
Raúl Reloba apunta la importancia del grupo de acción local, Adisac. Al carecer la comarca de un gobierno propio que actúe unitariamente, el papel de este grupo de acción local es muy importante al administrar los fondos Leader para la zona. Adisac, entre otros cometidos, debe seguir con su tarea de apoyar iniciativas de creación de empresas.
El principal riesgo es la despoblación. En poco más de medio siglo la comarca ha perdido dos tercios de su población. La mitad de sus municipios han perdido entre un 80 y un 90 % de sus habitantes. El resto han perdido entre un 50 y un 75 %, a excepción de Mombuey que pierde un tercio. Solo Puebla de Sanabria ha mantenido su población con altibajos. Las políticas de cohesión de la Unión Europea no han frenado la despoblación.
La inexistencia de una administración comarcal y de un gobierno que trabaje por los intereses comarcales, dejan al territorio "a merced de las decisiones que las distintas administraciones toman sobre una tierra desmembrada". A diferencia, por ejemplo, de la comarca de El Bierzo, que tiene su propio Estatuto Comarcal.
Los fondos europeos no logran los objetivos propuestos, entre otras razones por la falta de educación de una mentalidad emprendedora y empresarial de la población.
Las iniciativas apoyadas con fondos UE no producen empleo real, como los Centros de Interpretación que ofrecen dudas, ya que no producen empleo y no despiertan el interés entre la población donde se instalan. El acondicionamiento de casas privadas como casas rurales, que no producen empleo, dejan dudas sobre el beneficio para la economía de la zona.
El recorte de servicios tendrá una incidencia negativa. La crisis, y las ideologías de ciertos gobiernos, amparados en la despoblación de la comarca, hacen que esta sufra recortes que afectan directamente a sus habitantes y a su futuro desarrollo. Como ejemplo señala que la eliminación de servicios de tren puede hacer la comarca menos atractiva al tener menor comunicación con el exterior; las malas carreteras que unen con la capital de provincia, a dónde hay que acudir para diversos quehaceres como los especialistas sanitarios, hacen que la gente se piense dos veces quedarse en la comarca debido a lo vital que puede ser en un momento dado la distancia del hospital. La eliminación de escuelas produce un mayor gasto en las familias que tienen que llevar a sus hijos cada vez más lejos a la escuela. Con estos condicionantes Sanabria y Carballeda "ofrece una imagen, a quien en ella viven, o quisieran vivir, poco atractiva para realizar una vida mínimamente cómoda y con una mínima seguridad".