Constitución de la EBI, en presencia del presidente de la Junta de Castilla y León, Juan José Herrera (Foto:archivo de la EBI)
Defiende la profesionalidad del doctor Antonio Guillén Oterino, cuyos informes están rubricados por 31 expertos internacionales
La Estación Biológica Internacional (EBI) defiende su legitimidad a
la hora de emitir estudios científicos sobre el Lago de Sanabria, a la
vez que pide respeto para el coordinador del proyecto, el doctor Antonio
Guillén Oterino, y sus colaboradores, cuyos informes han rubricado 31
expertos de distintos países. La EBI recuerda que la Junta respalda
desde sus inicios sus investigaciones.
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| Ana Pedrero |
Así, la EBI informa de que tiene adquirida toda la legitimidad y el
deber de emitir estudios científicos sobre la conservación del Lago de
Sanabria. Así lo establece el contrato público de adjudicación para la
"Prestación del servicios de paseos por el
Lago de Sanabria en buque no contaminante" a la E.B.I., adjudicado con fecha 23 de marzo 2009, conforme al Pliego de Condiciones elaborado por la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Galende, publicado en el B.O.P.
De hecho, forma parte del objeto del contrato "(...) la necesidad de atender el interés público y cuidar los aspectos medioambientales que confluyen dentro del propósito de convertir al Lago de Sanabria en un punto limpio de contaminación en el ámbito del desarrollo sostenible del municipio (...)".
Asimismo, el contrato establece que "la implementación del servicio incluirá además un aula ambiental con proyecto formativo que consistirá en la organización de actividades didácticas sobre el Lago, su formación, la flora y la fauna fluviales, la conservación de la biodiversidad (...)".
Para ello "el adjudicatario deberá desarrollar paralelamente a la segunda actividad turística a bordo, estudios científicos y trabajos divulgativos sobre el Parque Natural del Lago de Sanabria que promuevan el disfrute y la conservación de sus valores, especialmente de su fauna y flora fluviales".
Por tanto la EBI, al emitir una alerta medioambiental basada en informes científicos rigurosos sobre la contaminación del Lago cumple escrupulosamente con el pliego de condiciones y el compromiso adquirido, por mucho que le pese a las asministraciones públicas.
La EBI considera que, a tenor de las reacciones mostradas en los
últimos días por el Consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio
Silván, y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero
(CHD), José Valín, desacreditando de forma alineada los estudios
científicos emitidos ahora y desde abril por la EBI, alegando que se
trata de una "empresa privada", evidencia una estrategia consensuada
para el rechazo y negativa a las conclusiones de los informes que
claramente no les son positivos, porque es de entender que, al menos el
consejero Silván, conocerá el objeto y desarrollo del contrato público
licitado y adjudicado con el consenso del Gobierno regional que
representa.
El presidente Herrera y el presidente Maíllo refrendaron la constitución y valoración de la EBI, que para el Gobierno regional parece haber seguido un proceso de conversión radical desde su constitución en 2002 hasta el momento actual, ya que tras la intervención del presidente regional elogiando públicamente en 2006 el carácter privado y no subvencionado de las investigaciones de la EBI, su actual consejero de Fomento y Medio Ambiente y la directiva del PP en Zamora, dirigida por el presidente de la Diputación, Fernando Maíllo, se permiten ahora criticar este mismo caracter altruista cuando sus intereses no convergen.
En 2002, se constituyeron los principios fundacionales de la EBI inspirados en la Carta Europea de Turismo Sostenible. El acto de constitución se rubricó en el marco del Segundo Convenio Internacional de Cooperación con las Universidades Federico II de Nápoles, UTAD de Portugal y Universidad de León, junto al ICNB de Portugal y la Wild Animals Vigilance Euro-Mediterranean Society.
En 2004, David de Salvador, coordinador general de la EBI, junto a la consejera de Medio Ambiente de la Junta, María Jesús Ruiz Ruiiz y Joao Silva Costa, presidente del Instituto da Conservaçao da Naturaleza de Portugal, rubricó el acuerdo de cooperación transfronteriza Interreg III A, para el desarrollo sostenible del turismo natural en el Duero.
La EBI adquirió el peso de coordinación transnacional. Tanto los acuerdos de cooperación transfronteriza como la constitución de esta primera Estación Biológica Internacional Ibérica de carácter privado se vieron refrendados en su sede el año 2006 por los ministros de
de Exteriores de España y Portugal junto a los embajadores de ambos países, el presidente de la Junta, el presidente de la Diputación y otras autoridades.
Todos los proyectos de investigación y conservación de hábitats de la EBI se coordinan y financian con recursos exclusivamente privados para salvaguardar su independencia e integridad frente a las administraciones públicas y partidismos políticos, obteniendo a lo largo de los años varios reconocimientos internacionales por su independencia en trabajos de uinvestigación y conservación de hábitats entre los que destacamos el Louvor 2007 de la Secretaría de Estado Portuguesa, el primer Premio Nacional de Turismo de Naturaleza 2008 o la Medalla Nacional al Mérito 2009 publicada por el Diario de la República de Portugal por desarrollar proyectos fronterizos de conservación de hábitats y especies financiados exclusivamente con fondos privados provenientes del ecoturismo.
A partir de esta independencia económico-política y gracias a la especialización técnica de sus colaboradores, la EBI ha desarrollado y financiado entre otros el Proyecto Águila de Bonelli para el ICNB (Instituto de Conservación de la Naturaleza de Portugal), el proycto piloto de Calidad Cinegética y Ambiental del Coto de Cozcurrita de Sayago, el módulo experimental del Proyecto de Filtros para la depuración natural de agua con macrófitos y el de Micro-hábitats Flotantes, así como en 2010 el diseño tecnológico y construcción del primer catamarán eólico-solar del mundo en el Lago de Sanabria, en el que también participa monsieur Pierre-Ivés Cousteau, hijo del famoso comandante francés del "Calypso" y embajador de la UICN , a partir del Tercer Convenio Internacional de Cooperación para la Investigación y Conservación de los Ecosistemas Acuáticos, entre la EBI y la Fundación Cousteau-Divers, firmado en mayo de 2011 en París.
Equipo de investigación de primer nivel internacional
En relación al coordinador de los informes, Antonio Guillén Oterino, la EBI quiere manifestar frente a las pretendidas muestras de desconsideración de las últimas horas, que se trata de los más prestigiosos expertos en ecosistemas acuáticos.
Doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad de Salamanca, catedrático de Ciencias Naturales desde 2001, experto paleontológico, botánico y palonológico, colaborador del Real Jardín Botánico y coordinador del "Proyecto Agua", por el que ha ganado el premio mundial Google Science Fair 2012, que ha contado con el reconocimiento del Príncipe de Asturias.
El "Proyecto Agua" se ha convertido en uno de los principales referentes internacionales sobre los organismos microscópicos del agua, con algo más de 2,7 millones de visitantes, cuyas imágenes y documentación son utilizadas por investigadores, profesores y estudiantes de todo el mundo, incluidas en numerosas publicaciones tanto científicas como didácticas de países como Portugal, Estados Unidos, México, Brasil, Argentina, Chile, Alemania, Reino Unido, Italia, China, Australia o la India, o en webs como la del Ministerio de Medio Ambiente, el Museu de Ciéncies Naturals de Barcelona, The Mind Museum de Filipinas, el Museu Nacional de História Natural e da Ciencia, Universidade de Lisboa, el Museu Balear de Ciencias Naturals o el Discovery Place de Charlotte, en Estados Unidos.
La EBI exige respeto a la profesionalidad y conocimiento que atesoran no sólo el coordinador principal de la investigación, sino a todo el equipo que ha colaborado durante la investigación, incluidos los 31 expertos de diferentes países que han rubricado su dictamen de conclusiones remitido puntualmente a las administraciones responsables.
Lago de Sanabria en buque no contaminante" a la E.B.I., adjudicado con fecha 23 de marzo 2009, conforme al Pliego de Condiciones elaborado por la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Galende, publicado en el B.O.P.
De hecho, forma parte del objeto del contrato "(...) la necesidad de atender el interés público y cuidar los aspectos medioambientales que confluyen dentro del propósito de convertir al Lago de Sanabria en un punto limpio de contaminación en el ámbito del desarrollo sostenible del municipio (...)".
Asimismo, el contrato establece que "la implementación del servicio incluirá además un aula ambiental con proyecto formativo que consistirá en la organización de actividades didácticas sobre el Lago, su formación, la flora y la fauna fluviales, la conservación de la biodiversidad (...)".
Para ello "el adjudicatario deberá desarrollar paralelamente a la segunda actividad turística a bordo, estudios científicos y trabajos divulgativos sobre el Parque Natural del Lago de Sanabria que promuevan el disfrute y la conservación de sus valores, especialmente de su fauna y flora fluviales".
Por tanto la EBI, al emitir una alerta medioambiental basada en informes científicos rigurosos sobre la contaminación del Lago cumple escrupulosamente con el pliego de condiciones y el compromiso adquirido, por mucho que le pese a las asministraciones públicas.
El presidente Herrera y el presidente Maíllo refrendaron la constitución y valoración de la EBI, que para el Gobierno regional parece haber seguido un proceso de conversión radical desde su constitución en 2002 hasta el momento actual, ya que tras la intervención del presidente regional elogiando públicamente en 2006 el carácter privado y no subvencionado de las investigaciones de la EBI, su actual consejero de Fomento y Medio Ambiente y la directiva del PP en Zamora, dirigida por el presidente de la Diputación, Fernando Maíllo, se permiten ahora criticar este mismo caracter altruista cuando sus intereses no convergen.
En 2002, se constituyeron los principios fundacionales de la EBI inspirados en la Carta Europea de Turismo Sostenible. El acto de constitución se rubricó en el marco del Segundo Convenio Internacional de Cooperación con las Universidades Federico II de Nápoles, UTAD de Portugal y Universidad de León, junto al ICNB de Portugal y la Wild Animals Vigilance Euro-Mediterranean Society.
En 2004, David de Salvador, coordinador general de la EBI, junto a la consejera de Medio Ambiente de la Junta, María Jesús Ruiz Ruiiz y Joao Silva Costa, presidente del Instituto da Conservaçao da Naturaleza de Portugal, rubricó el acuerdo de cooperación transfronteriza Interreg III A, para el desarrollo sostenible del turismo natural en el Duero.
La EBI adquirió el peso de coordinación transnacional. Tanto los acuerdos de cooperación transfronteriza como la constitución de esta primera Estación Biológica Internacional Ibérica de carácter privado se vieron refrendados en su sede el año 2006 por los ministros de
de Exteriores de España y Portugal junto a los embajadores de ambos países, el presidente de la Junta, el presidente de la Diputación y otras autoridades.
Todos los proyectos de investigación y conservación de hábitats de la EBI se coordinan y financian con recursos exclusivamente privados para salvaguardar su independencia e integridad frente a las administraciones públicas y partidismos políticos, obteniendo a lo largo de los años varios reconocimientos internacionales por su independencia en trabajos de uinvestigación y conservación de hábitats entre los que destacamos el Louvor 2007 de la Secretaría de Estado Portuguesa, el primer Premio Nacional de Turismo de Naturaleza 2008 o la Medalla Nacional al Mérito 2009 publicada por el Diario de la República de Portugal por desarrollar proyectos fronterizos de conservación de hábitats y especies financiados exclusivamente con fondos privados provenientes del ecoturismo.
A partir de esta independencia económico-política y gracias a la especialización técnica de sus colaboradores, la EBI ha desarrollado y financiado entre otros el Proyecto Águila de Bonelli para el ICNB (Instituto de Conservación de la Naturaleza de Portugal), el proycto piloto de Calidad Cinegética y Ambiental del Coto de Cozcurrita de Sayago, el módulo experimental del Proyecto de Filtros para la depuración natural de agua con macrófitos y el de Micro-hábitats Flotantes, así como en 2010 el diseño tecnológico y construcción del primer catamarán eólico-solar del mundo en el Lago de Sanabria, en el que también participa monsieur Pierre-Ivés Cousteau, hijo del famoso comandante francés del "Calypso" y embajador de la UICN , a partir del Tercer Convenio Internacional de Cooperación para la Investigación y Conservación de los Ecosistemas Acuáticos, entre la EBI y la Fundación Cousteau-Divers, firmado en mayo de 2011 en París.
Equipo de investigación de primer nivel internacional
En relación al coordinador de los informes, Antonio Guillén Oterino, la EBI quiere manifestar frente a las pretendidas muestras de desconsideración de las últimas horas, que se trata de los más prestigiosos expertos en ecosistemas acuáticos.
Doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad de Salamanca, catedrático de Ciencias Naturales desde 2001, experto paleontológico, botánico y palonológico, colaborador del Real Jardín Botánico y coordinador del "Proyecto Agua", por el que ha ganado el premio mundial Google Science Fair 2012, que ha contado con el reconocimiento del Príncipe de Asturias.
El "Proyecto Agua" se ha convertido en uno de los principales referentes internacionales sobre los organismos microscópicos del agua, con algo más de 2,7 millones de visitantes, cuyas imágenes y documentación son utilizadas por investigadores, profesores y estudiantes de todo el mundo, incluidas en numerosas publicaciones tanto científicas como didácticas de países como Portugal, Estados Unidos, México, Brasil, Argentina, Chile, Alemania, Reino Unido, Italia, China, Australia o la India, o en webs como la del Ministerio de Medio Ambiente, el Museu de Ciéncies Naturals de Barcelona, The Mind Museum de Filipinas, el Museu Nacional de História Natural e da Ciencia, Universidade de Lisboa, el Museu Balear de Ciencias Naturals o el Discovery Place de Charlotte, en Estados Unidos.
La EBI exige respeto a la profesionalidad y conocimiento que atesoran no sólo el coordinador principal de la investigación, sino a todo el equipo que ha colaborado durante la investigación, incluidos los 31 expertos de diferentes países que han rubricado su dictamen de conclusiones remitido puntualmente a las administraciones responsables.
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