El Tribunal Superior de Justicia ratifica la clasificación de los montes de Murias y Cerdillo como vecinales en Mano Común

PROVINCIA

Escrito por: Ángel GarcíaMiercoles, 29 de Octubre de 2014 07:27  Imagen de la iglesia de Murias de Sanabria. Esta sentencia, sobre la que ya no caben recursos, devuelve a los vecinos la titularidad de cerca de 800 hectáreas de montes en la zona de Murias y Cerdillo. Una titularidad que la Junta de Castilla y León, amparada en la decisión del Jurado Provincial, sostenía que era de la administración pública. Los vecinos de Murias de Sanabria y Cerdillo han ganado una batalla legal y sentimental que llevaban librando desde hace años. El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha ratificado la sentencia dictada por el Juzgado de lo Contencioso hace casi un año por la cual las cerca de 800 hectáreas de montes de la zona vuelven a considerarse Montes Vecinales de Mano Común.  Esto significa que a partir de ahora son los vecinos los dueños de cuidar, administrar y aprovecharse del posible beneficio que estos montes puedan arrojar. Una situación que no solamente supone una batalla legal ganada, sino también una batalla sentimental, porque a partir de ahora los vecinos serán dueños de algo que también tuvieron en posesión sus antepasados. Uno de los letrados encargados de llevar el caso, Claudino Lorenzo, explica a zamora24horas: “Ha sido una batalla larga y en la que hemos necesitado recopilar mucha información. Información histórica pero también documentos propios de la administración que en los años setenta ya reflejaban que estos montes eran de titularidad vecinal. Ahora, por fin, los vecinos han conseguido lo que deseaban”, comenta; a la vez que añade: “Aquí todo el mérito es de los vecinos, en especial de gente como Alfredo Gallego, Jesús Casas o David Beneitez, que son los vecinos que han perdido horas de su tiempo, haciendo muchos desplazamientos a Zamora, para conseguir que esto saliera adelante”. A efectos prácticos esta resolución implica que los vecinos podrán ahora gestionar los recursos que puedan generar de estos montes. Los beneficios obtenidos de la recolección de madera, de leña o cualquier otra actividad repercutirán en los vecinos a través de su junta rectora y asamblea vecinal. “Está claro que no se van a crear doscientos puestos de trabajo, pero siempre es una ayuda para los vecinos de la zona. Parece evidente que la mejor forma de cuidar el monte no es mediante cámaras, sino que sean los vecinos los que cuidan estas superficies porque son suyas, porque pueden suponerle un beneficio económico y porque también es algo de un valor sentimental incalculable”, finaliza Lorenzo. Hay que apuntar, para finalizar, que este sistema de Montes Vecinales de Mano Común es una fórmula que se utiliza mucho en Galicia, comunidad autónoma que mediante la Xunta tiene incluso una regulación propia para este tipo de situaciones.